martes, 12 de mayo de 2015

Spaghetti negro con gulas




¡Esta semana en un trasto en mi cocina, pasta! ¡Qué ganas tenía de traeros un platito de pasta! Se puede preparar de mil manera y además rapidito. Hoy os traigo pasta negra. ¿No la habéis probado nunca? Pues os animo a que lo hagáis porque os va a sorprender. Es una pasta teñida con tinta de calamar/sepia, por eso creo que para acompañarla lo mejor son productos del mar. En  esta ocasión la he preparado con gulas. Muy fácil de cocinar y muy vistoso, la verdad.
¿Qué os parece si empezamos?



INGREDIENTES (para 2 personas)
  • Pasta negra (80 gr. aprox. por persona)
  • 1 paquete de gulas
  • 4-5 ajos
  • 1-2 chiles
  • Aceite




MANOS A LA OBRA

La pasta es un plato que hay comer caliente, no tiene espera. Por eso, y sabiendo que lo que acompaña en esta ocasión a la pasta se hace realmente rápido, me gusta poner el agua a hervir mientras preparo las gulas. De esta manera irá todo encadenado y comeremos un plato en su punto. 
  1. Poner agua a hervir en una cazuela. Añadir al agua un poco de sal y un chorreoncillo de aceite. Cuando comience a hervir introducir la pasta. En el envase del fabricante os viene el tiempo de cocción de cada pasta. Habitualmente es el tiempo para que la pasta quede en su punto. Para aquellos que os guste la pasta "al dente" como a mí, lo mejor es ir probando y sacar la pasta cuando veáis que por fuera está tierna pero tiene un punto crujiente. Si no os gusta así lo único que tenéis que hacer es dejar que se cueza un poco más.
  2. Colar la pasta y colocarla en el plato. La pasta no se pasa por agua fría. 
  3. Al mismo tiempo, coger una sartén mediana y poner abundante aceite, que cubra el culo y un poco más, calentar a fuego medio. Esta cantidad de aceite es porque será nuestro aliño de la pasta. Si nos quedamos cortos la pasta nos quedará seca.
  4. Cuando el aceite empiece a estar caliente añadir los ajos picaditos y el chile. La cantidad de chile que pongáis dependerá de si os gusta más o menos el picante. Pero ponerle aunque sea un poquito  porque potencia el sabor del plato. 
  5. Cuando los ajos empiecen a coger color (cuidado que no se quemen) añadir las gulas. Ponerle un poco de sal,  rehogar unos minutos y listo.
  6. Colocar sobre la pasta las gulas con el aceitito para presentarlo en la mesa. Quedaréis como reyes, y que después cada uno mezcle a su antojo.
  7. ¡A comeerrrrr!!!!!



No hay comentarios:

Publicar un comentario